Lunes feriado por la noche no se ni que decir. Resaca de un fin de semana que fue cualquier cosa menos fin de algo. Tres bocas me preguntan si pueden fumar adentro una de ellas me regala un ramo de flores y me da un beso en el baño de un bar al que nunca fui. ¿Cómo podría meter la narración en todo esto? si fueron destellos aislados, inconexos que probablemente hayan terminado si ocurrieron. Y su sombra, el sobretodo azul marino al que hubiera halagado con la peor de las frases ahogadas y me contuve. Seis ojos para vos o salir a fumar un pucho y arruinar la foto. Me gustaría estar con vos, me gustaría este rato de nada con vos pero es como si ¿te darás cuenta? yo por momento, quizás al otro dia, medio despierta, medio dormida dejo entrar un rayo de luz de la noche de ayer lleno de porqués y de dudas y de peros. Y el préterito pluscuamperfecto, ese que empieza con: y si hubiera. Entonces saco a pasear todo ese desorden a ver si se diluye con el frio y algo de suerte. Como si a veces quisiese despedirme por un rato. No llevarte a todos lados, absolutamente a todos lados, mi tapado avanza la calle mira a uno, mira a otra, piensa igual, dice igual, siente igual. Y que aburrido ver siempre la misma gente, con los mismos recuerdos, de los mismos lugares. Me fui de tema. Suelo irme de tema cuando veo que te estás acercando. Es que si fueras una cárcel me encerraría en vos todo el invierno. Haría un mapa. estudiaría las cañerias y los pasadizos secretos solo por si acaso, solo porque hay que conocer siempre la salida de emergencia. Y el juicio: No debería asociarte a ese concepto. Pienso que, después de no se cuántos años y un fin de semana largo y corto en emociones, podría preguntarme, si me dieran ganas, cómo es que me cruzas y no te atropello cuando los semáforos no funcionan que es la mayoría del tiempo. Cómo es que no nos cruzamos y apagamos las luces por un rato.